En cuanto a las dimensiones en torno a la seguridad alimentaria, que
giran en 4 ejes fundamentales accesabilidad, disponibilidad, utilización y
estabilidad, respecto a mi tema propuesto de investigación, he de comentar lo
siguiente.
Considerando al
maíz (Zea mays) como alimento fundamental para nuestro país y con
un muy acentuado uso y aprovechamiento ancestral en la región de la
Montaña de Guerrero, la cual es clasificada como la más marginada y pobre del
país de acuerdo a todos los indicadores oficiales y de agencias
internacionales, es que se hace imperativo evaluar los impactos del Cambio
Climático de 14 razas de maíz criollo adaptables a esta región de laderas
y topografía cerril con escasa capa arable y que aunque con bajos rendimientos,
son adaptables a las condiciones del entorno y ampliamente aceptados por los
lugareños para sus múltiples usos culinarios, producto de una gran diversidad.
En este sentido
la accesabilidad a este grano básico de la población en la región
referida, que se compone en su gran mayoría de grupos étnicos de nahuas,
mixtecos y tlapanecos, es de vital importancia, en términos de semillas
cultivables y como reserva genética.
La domesticación
de por lo menos 14 razas de maíz criollo, se presume amenazada en relación a su
utilización con la introducción de los llamados maíces mejorados de
variedades de polinización libre o los híbridos nacionales y comerciales, hasta
el día de hoy con la tecnología de los organismos genéticamente modificados
(OGM) o transgénicos. No obstante existe una marcada preferencia por los maíces
criollos. Sin embargo, la disponibilidad de estos maíces criollos ha ido
mermando aunque sea marginal, no solo por la razones anteriores y que se
presume ante los impactos en los diversos escenarios pronosticados, se afecten
de manera significativa ante resultados adversos en cuanto a la productividad
de los diversos materiales. Para ello, será determinante evaluar en campo
mediante entrevistas de las 14 razas : Ancho, Arrocillo, Bolita, Chalqueño,
Conejo, Cónico, Elotes Occidentales, Mushito, Olotillo, Pepitilla, Tepecintle,
Tuxpeño, Vandeño y Zapalote chico; estudiados entre otros por la Comisión
nacional para el Uso y Conocimiento de la Biodiversidad (CONABIO) ante
escenarios de Cambio Climático y en ese tenor estar en condiciones de estimar
su estabilidad con el paso del tiempo, sobre todo ante el escenario
conservador de incremento climático de 1.5 grados centígrados en los próximos
30 años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario